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Transcript

S1. Introducción

El amor como vocación universal

Encíclica Redemptor hominis (1979), n. 10

“El hombre no puede vivir sin amor. Él permanece para sí mismo un ser incomprensible, su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y lo hace propio, si no participa en él vivamente. Por esto precisamente, Cristo Redentor, como se ha dicho anteriormente, revela plenamente el hombre al mismo hombre”.

¿Qué es el amor?

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"El futuro del mundo y de la Iglesia pasa a través de la familia"

La visión profética de san Juan Pablo II

13 mayo de 1981

S. Juan Pablo II

“Que una «mano materna» haya desviado la bala mortal muestra sólo una vez más que no existe un destino inmutable, que la fe y la oración son poderosas, que pueden influir en la historia y, que al final, la oración es más fuerte que las balas, la fe más potente que las divisiones”.

La vocación universal al amor: el fin último

Constitución apostólica Gaudium et spes (1965), n. 19

“La razón más alta de la dignidad humana consiste en la vocación del hombre a la unión con Dios. Desde su mismo nacimiento, el hombre es invitado al diálogo con Dios. Existe pura y simplemente por el amor de Dios, que lo creó, y por el amor de Dios, que lo conserva. Y sólo se puede decir que vive en la plenitud de la verdad cuando reconoce libremente ese amor y se confía por entero a su Creador”.

La vocación particular al amor: medio que conduce al fin

Exhortación apostólica Familiaris Consortio (1981), n. 11

"Dios ha creado al hombre a su imagen y semejanza: llamándolo a la existencia por amor, lo ha llamado al mismo tiempo al amor.Dios es amor y vive en sí mismo un misterio de comunión personal de amor. Creándola a su imagen y conservándola continuamente en el ser, Dios inscribe en la humanidad del hombre y de la mujer la vocación y consiguientemente la capacidad y la responsabilidad del amor y de la comunión. El amor es por tanto la vocación fundamental e innata de todo ser humano.En cuanto espíritu encarnado, es decir, alma que se expresa en el cuerpo informado por un espíritu inmortal, el hombre está llamado al amor en esta su totalidad unificada. El amor abarca también el cuerpo humano y el cuerpo se hace partícipe del amor espiritual.La Revelación cristiana conoce dos modos específicos de realizar integralmente la vocación de la persona humana al amor: el Matrimonio y la Virginidad. Tanto el uno como la otra, en su forma propia, son una concretización de la verdad más profunda del hombre, de su «ser imagen de Dios»".

Y, entonces...¿cuál es mi vocación?

Discernimiento segúns. Ignacio de Loyola

¡A orar se ha dicho!

La vocación mana de una intimidad/amistad con el Señor

Beato Bartolomé Blanco Márquez(1914-1936)

Deberes

inventa tu propia oración de fidelidad para ordenar tus afectos desordenados a Dios y concreción de vocación.

¿Alguna duda?