Rafael Arroyo, jefe del Departamento de Neurología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo
“La incidencia del ictus ha crecido en los últimos años entre la población menor de 50 años debido al incremento de malos hábitos como fumar, consumir drogas o excesivas cantidades de alcohol, el sedentarismo, una mala alimentación o el estrés”