FIN_

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Las aventuras para encontrar a Don Simón

Las aventuras para encontrar a Don Simón

FIN!

El genio sorprendido ante estos pedidos, recordó a una amiga que se había hecho hace muchos años en su escuela para genios. María era una genio que tenía color verde, ella era diferente a los demás, pero siempre fue optimista, y estaba predispuesta a ayudar a quien necesitara. Su mayor proyecto era poder crear un lugar donde expandir su ayuda y buscar soluciones para contener a quien lo necesite. Fue así que gracias a su perseverancia y dedicación creó la organización Par 21. Al recordar todo esto, el genio les dijo a los animalitos que su deseo estaba equivocado, que ellos no debían cambiar quienes eran, su esencia, ya que esto es lo que les daba un propósito en la vida. Les contó la historia de María, explicándoles que ellos siendo “diferentes” pueden ayudar a muchas personas, a aquellos que tengan las mismas dificultades a superar los obstáculos que se les presenten como ellos lograron superarlos, o a quien necesite una ayuda para poder comprender que todos somos iguales e importantes como somos. El genio les dijo también que María tenía una Organización donde ayudaban a distintos animales y familias de los mismos, que si querían podían ir a conocer el lugar y hasta formar parte de la misma, siendo voluntarios para brindar sus experiencias hacia otros animales. Ellos muy esperanzados y emocionados, decidieron no pedir cambiar quienes eran, por lo contrario, le preguntaron al genio cuáles eran sus tres deseos. El genio confundido pero emocionado, les dijo que:

1. Quería que su hogar esté cerca del mar, para poder oír las olas todas las noches, todos los días.
2. Volver a ver a María y ver como creció su proyecto.
3. Y por último pero no menos importante, pidió que los tres animalitos cumplieran sus sueños, esperando con ansias volverlos a ver.

Facundo, Carla y Sofía, contentos y muy emocionados, les regalaron sus deseos al genio para que todos estos se les cumplieran. Antes de despedirse para volver y conocer a María, se abrazaron los cuatro fuertemente, deseando volver a verse en un pequeño tiempo.