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Certámenes de microrrelato y poesía

Curso 2021-2022

3ª CATEGORÍA“Asomarse a la vida” de Alonso Abad

2ª CATEGORÍA“Ojos cerrados” de Sofía Nadal

1ª CATEGORÍA“El ascensor” de Julieta Codesido

3º CATEGORÍA“Lágrimas del cielo” de Iratxe Espejo

2ª CATEGORÍA“La voz del fuego” de Ana Mateo

1ª CATEGORÍA. "La brisa del mar” de Irene Hernández

POESÍA

MICRORRELATO

Ganadores

Microrrelato

Irene Hernández San Francisco 2º ESO ESCLAVAS DEL SAGRADO CORAZÓN. SALAMANCA

Mario camina despacio de mi mano mientras respira profundo.No hay día que pase en el año, que no dé las gracias, que no se sienta asombrado por todo lo que le rodea: el olor de la brisa, el sonido del mar, el canto de los pájaros, el calor del sol, el frescor de la hierba, las luces y las sombras que llenan su cuadro. Las gafas oscuras ocultan sus lágrimas de emoción,de agradecimiento por poder disfrutar de todo esto,de la naturaleza un día más.Ya no recuerda o no quiere acordarse de aquel tres de mayo, en el que un duro impacto apagó sus ojos y despertó su alma, dormida desde hacía mucho tiempo, sumergida en en las prisas y en las preocupaciones superficiales.

La brisa del mar

Ana Mateo Ruiz - 4ºESOColegio Esclavas del Sagrado Corazón Santander

Lava. Ruina. Destrucción. Una isla tornada en colosal hoguera. Casas, calles, vidas sucumbiendo ante ríos incandescentes. El despertar de un volcán: el inicio de este infierno. Asombra pensar que la puerta al caos es obra de Dios. Que su creación puede llevar a la destrucción. Que en un minuto perdemos todo, en un segundo la suerte nos vuelve la espalda, y un instante separa la vida de la muerte. Pero, para mí, esta tragedia es también la voz del Creador hablándonos desde su obra, recordándonos que la vida es demasiado breve para malgastarla, que sólo es certera la muerte y lo único que nos acompaña a la eternidad es la huella que elegimos dejar en los demás. Tal vez necesitábamos esa feroz voz de fuego para abrir los ojos, esa destrucción para unirnos, y liberar la solidaridad entre hermanos en un mundo cada vez menos humano.

La voz del fuego

Iratxe Espejo 2º bachillerato Colegio Esclavas del Sagrado Corazón Fátima

De pequeña no me gustaba la lluvia. Me obligaba a quedarme en casa y me hacía pensar en cosas tristes. Pero un día, mientras estaba en clase de matemáticas, eso cambió; llevaba lloviendo desde la mañana y de repente paró y salió el sol. Miré por la ventana, distraída… y lo que vi me dejó asombrada: las lágrimas del cielo se posaban en las hojas de las plantas y árboles que crecían cerca, y la luz del sol las hacía brillar como miles de minúsculos diamantes. No encuentro palabras para describir la belleza de lo que vi.Había tanta belleza y tanta luz... Era solo agua y luz, pero os prometo que nunca había visto algo tan… iridiscente. Desde entonces no odio la lluvia, porque he comprendido que es un instrumento que la Madre Naturaleza utiliza para crear obras que ninguna mano humana podría crear o imaginar.

Lagrimas del cielo

Poesía

Julieta Codesido, (1º ESO). CPR. Plurilingüe Esclavas del SCJ A Coruña.

La del segundo, toca el violín, con su perra llamada Marilín. Al pasar me saludó, y su perra me ladró.Gran familia en el tercero, con Pedrito gateando. Mira tú quién era ese, a quién siempre oigo llorando. En el cuarto está Paulina, me da una chocolatina.Tiene el pelo rizo y rojo: el sueño de cualquier piojo. Y por fin llego hasta el quinto pensando en mis vecinos. ¡Tanto tiempo en esta casa y nunca antes nos conocimos! Déjate sorprender, y no uses el ascensor. Sube un día a pie, y mira a tu alrededor.

Era un día de invierno, un lunes agotador. Llegué a casa del colegio, ¡averiado el ascensor! Yo vivo en el piso cinco, como todos, no es distinto. Y tengo algunos vecinos, aunque poco coincidimos. Comienzo a subir andando, me paro en el descansillo; oigo voces más arriba ¿quién anda por el pasillo? En el primero vive Augusto, que feo, ¡vaya susto! Tiene una barba súper larga, ¡cuidado con no pisarla!

El ascensor

Sofía Nadal (4º ESO). Colegio Sagrado Corazón Esclavas, Valencia

Suspiraba el viento esa tarde en el prado pero no escuchaba el de oídos tapados. Tan solo oía los gritos enfadados de quien discute sin mirar al de al lado. Bailaban las olas del mar en verano pero no miraba el de ojos cerrados. Tan solo veía el dinero ganado. Nada vale más que unos cuantos centavos. Dormía el bosque con sueños encantados pero nadie ve lo que no tiene al lado. Lo especial del mundo no lo han encontrado porque nadie tiene el valor de buscarlo. Oculta el jardín un último regalo. Se trata del secreto mejor guardado. Para los sencillos está reservado un mundo asombroso nunca imaginado.

Ojos cerrados

Alonso Abad , 1º Bach.Colegio Esclavas, SCJ – Cádiz

Asoma a la vida con timidez y curiosidad. Sonríe, grita, llora con notas vigorosas Olor a césped, a breve mojado, a tierra al amanecer. Mecido por brazos acogedores que Brindan calidez, seguridad y serenidad Rayos de luz acarician su piel mueca Asombrados sus ojos miran, otean, escudriñan, indagan. Toda una vida se abre ante su mirada Espera que cada paso que dé, cada palabra que diga, cada segundo que viva, le permitirá maravillarse ante tanta grandeza y dará gracias a Dios por permitirle asomarse a la vida.

Asomarse a la vida

¡Enhorabuena!