Cuando los docentes implementan programas de simulación para la resolución de problemas, la informática favorece la futura transferencia a situaciones de la vida profesional de los futuros profesionales. Ya que permite acercar la realidad y tomar decisiones arriesgándose a fallar, esto sin perjuicio de equivocarse dado que la máquina permite ese ensayo, prueba o evaluación; los programas de simulación permiten la interacción contraria a otras herramientas o material didáctico digital que fomentan la pasividad sobre los estudiantes, si pudiera escoger entre un simulador y un video, como docente me inclino al simulador, porque es acá donde se verá lo aprendido en clases en una práctica simulada.
Las simulaciones cuentan con un modelo preestablecido, pero permiten bajo los parámetros establecidos por el programador operar con entornos y herramientas que se asemejan a situaciones de la vida profesional y académica.
El uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en el ámbito educativo enfocado a un mundo digital y globalizado, traen consigo la necesidad de realizar cambios en la práctica docente, particularmente cuando se trabaja en el aula.
Las nuevas tecnologías como recurso didáctico y como medio de transferencia del conocimiento, hecho de forma correcta, puede potenciar el desarrollo de niños, adolescentes y adultos, cuando aplicamos simuladores como apoyo educativo en el proceso de enseñanza aprendizaje, realza la capacidad cognitiva del estudiante, ya que una de las principales funciones de los simuladores en la educación debe ser siempre el apoyo a los docentes en la transferencia del conocimiento.
Al hablar de educación y de nuevos modelos educativos es necesario hablar de tecnología. La Real Academia Española define las palabras tecnología como “la aplicación de conocimientos y habilidades por el ser humano para obtener solución a un problema o satisfacer alguna necesidad”; y educación como “la acción y efecto de educar, trasmitir por medio de la acción de un docente”.
Las tecnologías permiten la posibilidad del modelaje (simulación) construidos a partir de lo que Penner denomina "modelos físicos" que permiten la exploración, el ensayo y error, la predicción, la resolución de problemas y la externalización de representaciones sobre concepciones ingenuas, entre otros procesos cognitivos.
Un simulador es una máquina que reproduce el comportamiento de un sistema en ciertas condiciones, lo que permite que la persona que debe manejar dicho sistema pueda entrenarse.
Aplicados a la educación los simuladores se entienden como programas que contienen un modelo de algún aspecto del mundo y que permite al estudiante cambiar ciertos parámetros o variables de entrada, ejecutar o correr el modelo y desplegar los resultados (Escamilla, 2000). Hoy en día, las actuales tecnologías han cambiado al aparecer nuevos soportes, como el magnético y el óptico; la información ahora es digitalizada: se pasa del lápiz y el papel al teclado y la pantalla y, aún más, a la simulación (Rosario, 2005).
“Los simuladores como recurso de aprendizaje”
Desarrollo