Fuentes: ACN y Prensa Latina
En 2018 entró en vigor en Alemania una norma que obliga a las plataformas digitales a eliminar mensajes con contenido delictivo y, de no hacerlo, enfrentan multas millonarias.
Un cibercrimen en Reino Unido se puede pagar con 14 años de prisión y hasta con cadena perpetua. Entre otros aspectos, la ley recoge el daño al bienestar de las personas, a la seguridad nacional y de cualquier otra nación, etc.

Hace tres años, Francia aprobó una ley contra la manipulación de la información, la cual implica el castigo con penas de 45 000 euros o la cárcel. La normativa destaca tres delitos fundamentales: falsas noticias manifiestas, difusión masiva de estas y alteración del orden público y del voto electoral.
EL MUNDO
TAMBIÉN SE BLINDA

En mayo de 2019, el Consejo Europeo estableció un marco jurídico que permite a la Unión Europea imponer sanciones específicas para impedir los ciberataques y responder a estos.
El Parlamento de Nicaragua aprobó en el 2020 una ley contra los ciberdelitos para hacer frente a crímenes cibernéticos como el hackeo, el robo de identidad y el espionaje informático; pero también a las personas que difundan información falsa.


