JUAN Y LA HABICHUELA MAGICA Y JUEGOS

Cuentos en verso para niños perversos

Roald Dahl

cuento

actividades

2.

Juan y la habichuela mágica

Roald Dahl

01

La madre de Juan dijo:

Se acabó.No queda un chavo en casa… Y digo yo que ofrezcas a la vaca en el mercado, a ver si la compra algún tipo despistado. Limítate a decir lo sana que es la Juana, aunque tú y yo sepamos que es anciana».

02

«¡Mira el sabihondo!

Se fue Juan con la vaca y volvió luego diciendo:

«¡Madre, cómo les di el pego! Jamás habrá un negocio tan redondo como el que hizo tu Juan».

03

Seguro que tu trato es un desastre y que te ha dado el timo algún pillastre…».

Mas cuando Juan, con gesto artero y pillo, extrajo una habichuela del bolsillo,su madre saltó un cuádruple mortal,

04

Se puso azul y le gritó:

«¡Animal!¿Te has vuelto loco? Dime, tarambana,¿te han dado una habichuela por la Juana?¡Te mato!»,

05

y tiró al huerto la habichuela, agarró a Juan y le atizó candelacon la mangueta de la aspiradora zurrándole lo menos media hora.

06

A las diez de la noche, sin embargo, la alubia empezó a echar un tallo largo, tan largo que la punta se perdía entre las nubes cuando llegó el día.

La madre dijo: «¡Calla, pasmarote! ¿Acaso da habichuelas ese brote que pueda yo meter en el puchero? ¡No agotes mi paciencia, majadero!».

«¡Madre, echa un vistazo y dime si no hice ayer un negociazo!».

Juanito gritó:

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La madre dijo:

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«¡Por Dios, mamá, que no hablo de semillas! ¿No ves que es de oro? ¡Mira cómo brilla!». ¡Cuánta razón tenía el rapazuelo!

09

Allá afuera, estirándose hasta el cielo, brillaba una alta torre de hojas de oro más imponente que el mayor tesoro.

10

La madre de Juanito, espeluznada, pegó otro brinco y dijo: «¡Qué burrada! Hoy mismo compro un Rolls, me voy a Ibizay abro una cuenta en una banca suiza.

¡Vamos, granuja, tráeme las que puedas y las que no sean de oro te las quedas!».

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12

Y Juan, sin atreverse a vacilar,trepó por la habichuela sin tardar, ganando altura —no preguntéis cuánta— hasta alcanzar la punta de la planta.

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Mas una vez allí ocurrió una cosa de lo más espantable y horrorosa: se levantó un estruendo tremebundo como si se acercara el fin del mundo y habló una voz terrible, muy cercana,que dijo:

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«¡¡ESTOY OLIENDO A CARNE HUMANA!!».

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Juanito se dio un susto de caballo y sin pensarlo más bajó del tallo.

16

«¡Ay, madre!, si lo sé yo no te escucho, que arriba hay un señor que grita mucho, que yo lo he visto, y me parece injusto subir y que me peguen otro susto…!

Me olió sin verme, madre, te lo juro. Es un gigante enorme, estoy seguro…».

¡Qué tonterías dices, mentecato!».

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Es un gigante. Y anda bien de olfato.

18

Naturalmente que te olió, marrano, que no te duchas más que en el verano y apestas como un chivo y no obedeces por más que te lo mande cien mil veces…»

19

Juan respondió: «Mamá, ¿por qué no subes, ya que eres tan valiente, hasta las nubes tú misma?», y ella dijo: «¡Desde luego! Yo sin luchar a tope no me entrego».

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Se arremangó las faldas y de un salto tomó la enorme planta por asalto y se perdió en sus hojas, mientras Juan dudaba del buen éxito del plan, temiendo que el tufillo mareante de su mamá enfadara a aquel gigante.

21

Mirando arriba estaba… hasta que un ruido que no esperaba, más bien un chasquido terrible, y una voz desde la altura llegaron a su oído:

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«¡ESTABA DURA Y LE SOBRABAN HUESOS, PERO AL MENOS LOS DOS MUSLITOS ME HAN SABIDO BUENOS!»

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«¡Atiza!», exclamó Juan, «¡Ese chiflado se merendó a mi madre de un bocado!». Olfateó. «Ya lo decía yo, ese tufillo horrible…». Y contempló

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Y contemplo la inmensa planta de oro: «¡Mala suerte! Tendré que enjabonarme y frotar fuerte para poder pasar por inodoro si quiero reincidir en lo del oro».

25

Conque se dirigió al cuarto de baño por primera vez en aquel año, gastó siete champús, doce jabones y se llenó los pelos de lociones, se cepilló las muelas y los dientes y se dejó las uñas relucientes.

26

Volvió luego a la planta nuestro chico y allí arriba seguía, hecho un borrico, sorbiéndose los mocos y escupiendo, nuestro gigante bárbaro y horrendo: «¡¡NO ESTOY OLIENDO A NADA POR AHORA!!», gruñía sordamente.

27

Varias horas esperó Juan. Por fin cayó dormido el monstruo, y el muchacho, sin un ruido, hizo cosecha de oro a troche y moche y durmió billonario aquella noche.

28

«Bañarse», dijo, «es algo muy seguro.Me daré un baño al mes en el futuro».

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DOBBLE JUAN Y LA HABICHUELA MÁGICA

PALABRA

• HABICHUELA
• Legumbre
• Color marrón o verde
• Laplanta en el suelo.
• GIGANTE
• personaje del cuento
• Vive en las alturas.
• Tiene buen olfato.
• VACA
• Animal
• Tiene manchas
• Come hierba.
• PLANTAR
• Es una acción
• Lo hace Juan
• En la huerta
• TREPAR
• Es una acción
• Lo hace Juan y la madre
• Sube por la planta.
• OLER
• Es una acción
• No le gusta a Juan
• En el baño.

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Título 2

Título 2

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10

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• Juan es un niño pobre.
• Mamá quiere vender a Juana.
• Juana es una vaca.
• Juan vende la vaca.
• Le dan una semilla.
• La semilla no vale nada.
• Juan planta la semilla.
• El tallo crece alto.
• Las hojas son de oro.
• Juan trepa por el tallo.
• Mamá trepa por el tallo.
• El gigante tiene olfato.
• Juan no se ducha.
• La mamá no se ducha.
• El gigante coge a mamá.
• Juan es muy listo.
• Juan se hace rico.
• Juan tiene un plan.

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Autor pictogramas: Sergio Palao Procedencia: ARASAAC (http://arasaac.org) Licencia: CC (BY-NC-SA) Propiedad: Gobierno de Aragón

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Autores de la unidad adaptación digital: Sonia Griñán Material elaborado para el S.A.E.D. Consejería de Educación y Cultura. Región de Murcia