Los Pactos Bíblicos - Religión Evangélica

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6 PACTOS BÍBLICOS

Pacto Adámico

Pacto Mosaico

Pacto Abrámico

Pacto de Gracia

Pacto Noético

Pacto Davídico

El pacto adámico fue el primer pacto que hizo Dios con el hombre, en el jardín del Edén. Fue un pacto condicional y era dependiente de la fidelidad de Adán hacia Dios. Consistía en que el hombre no debería comer de la fruta prohibida, con la consecuencia de que si lo hiciera estaría condenado a la muerte. Este pacto está directamente relacionado al Pacto de Gracia, ya que este se llevó a cabo por consecuencia del pecado de Adán.

Este pacto incondicional fue hecho entre Dios y la familia de Noé, en el cual reafirma el orden normal de la naturaleza tras el Diluvio Universal. Aquí, Dios pasa a permitir que el hombre pueda comer de la carne fresca de animales, establece la pena capital al asesinato y proclamaba una profecía sobre Sem acerca de la venida del Mesías.

El Pacto Abrahámico fue otro pacto incondicional entre Dios y el hombre, de hecho el primero con la nación de Israel. En este pacto, Dios designaba diversas bendiciones sobre la vida de Abraham: que tendría gran descendencia y bendición personal, que su nombre seria grande y que él mismo sería una bendición. Además, otras bendiciones son lanzadas sobre los descendientes de Abraham, la nación de Israel: Dios dijo que serían una gran nación, con la promesa de una "Tierra Prometida", y que a través de sus descendientes, Abraham sería bendición para el mundo entero.

Este fue el pacto en el que, mientras viajaban en el desierto, Dios dio al pueblo de Israel su Ley (dividida entre mandamientos, juicios y ordenanzas) para ordenar su relación con el pueblo. Se trataba de un pacto condicional ya que incorporaba el principio de que si Israel fuera desobediente, serían disciplinados por Dios. Aun con el fracaso del pacto por parte del pueblo, Dios prometió que nunca abandonaría a su pueblo, principalmente mediante el Pacto de Gracia que pone un fin al Pacto Mosaico.

El pacto con David confirma y amplía las promesas de la descendencias hechas con con Abraham y Moisés. En este pacto incondicional, Dios promete un linaje real eterno a David, lo que se cumpliría en Cristo. Además, se promete que David tendría un hijo, Salomón, que le sucedería y finalizaría su reino, además de construir el Templo de Jerusalén.

El Pacto de la Gracia es un pacto incondicional hecho entre Dios y los redimidos por la sangre de Cristo. La creencia no es parte del pacto, sino que es el fundamento por el cual se mantiene el pacto y por el cual el creyente puede disfrutar de las bendiciones que ofrece. El pacto fue hecho con los hijos de Dios y se basa en la Salvación por medio de Jesucristo, quien representa la consumación de todos los pactos anteriores.