Segundo_10

Jesús nos enseña el camino

para ser felices

Segundo de catequesis

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INicio

Oración

Jesús vivió feliz

Felicidad

Bienaventuranzas

Jesús nos enseña a ser felices confiando en Dios, amando a los necesitados, estando cerca de ellos y ayudándoles. Siendo personas que favorecen todo lo que contribuye a la paz.

Índice

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¿Cómo busca la gente la felicidad?

¿En qué se nota que una persona es feliz?

¿Conoces a alguien que sea feliz?

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¿Eres feliz?

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Nos enseñó las bienaventuranzas

Bienaventuranzas

¡Nos quiere felices!

Ya hemos visto otras veces que Jesús no quiere que estemos tristes.

Jesús se dio cuenta de que la gente no era verdaderamente feliz y un día les enseñó el camino que conduce a la felicidad.

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Dichosos sereis cuando os insulten y os persigan

Dichosos los perseguidos

Dichosos los que construyen la paz

Dichosos los que tienen un corazón limpio

Dichosos los misericordiosos

Dichosos los que tienen hambre y sed de hacer la voluntad de Dios

Dichosos los humildes

Dichosos los que están tristes

Dichosos los pobres en el espíritu

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Mateo 5, 1-12

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Al ver a la gente, Jesús subió al monte, se sentó, y se le acercaron sus discípulos. Entonces comenzó a enseñarles con estas palabras:

Bienaventuranzas

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Confiamos en Dios. Nuestra riqueza es Dios.Como Dios no nos falla nunca... ¡somos ricos!

Esto no quiere decir que tengamos que vivir en la pobreza.Significa que reconocemos que somos débiles, que necesitamos de los demás y necesitamos a Dios.

Dichosos los pobres en el espíritu, porque suyo es el reino de los cielos.

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A Dios le agrada que pensemos en los demás, que nos preocupemos por ellos e intentemos ayudarles.Dios nos consuela y nos anima a seguir colaborando.

Dios no quiere que estemos tristes pero a veces es inevitable porque hay muchas situaciones desagradables.El que se entristece porque ve que hay personas que pasan hambre, o que tienen dolor o pasan por una situación difícil, quiere decir que se preocupa por esa persona.

Dichosos los que están tristes, porque Dios los consolará.

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Con ese carácter, Dios nos promete el cielo.

Dios no quiere que seamos violentos ni que nos creamos mejores que los demás.Por el contrario, quiere que seamos bondadosos, pacientes, tranquilos... pero decididos en la defensa de la justicia.

Dichosos los humildes, porque ellos heredarán la tierra.

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Tener hambre y sed de hacer la voluntad de Dios quiere decir que queremos hacer lo que que a Dios le agrada: tratar muy bien a los demás.

Dios sí que nos trata bien y Jesús nos enseñó que siempre podemos contar con Él y nos da la fuerza que necesitamos.

Dichosos los que tienen hambre y sed de hacer la voluntad de Dios, porque Dios los saciará.

Los misericordiosos son los que se compadecen de los demás y perdonan. Los que tratan a las personas que tienen problemas, penas o tristezas de forma sensible, tierna y acogedora.

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Dios promete perdonarte y acogerte siempre con cariño.

Dichosos los misericordiosos,porque Dios tendrá misericordia de ellos.

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No hace falta que saques el estropajo y el jabón. Lo que debemos hacer es ser transparentes, sin dobles intenciones, sin querer aparentar lo que no somos (por ejemplo, no poner "cara de bueno" y empujar a un compañero)

Cuanto más sencillos somos más fácil es mantenerse cerca de Dios.

Dichosos los que tienen un corazón limpio,porque ellos verán a Dios.

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Para poner paz en los demás, primero hay que sentir paz en uno mismo, hay que evitar peleas, insultos y rencores. Hay que procurar ser agradables con los demás.

Si nos sentimos en paz con los demás, podremos sentir el profundo amor que Dios nos tiene.

Dichosos los que construyen la paz,porque serán llamados hijos de Dios.

Dios nos pide que cuando veamos que alguien trata mal a una persona la defendamos aunque los demás no hagan nada. Debemos defender lo que agrada a Dios aunque los demás estén en nuestra contra.

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El amor que más importa es el que Dios nos tiene, su amor nos protege y compensa todo sufrimiento.

Dichosos los perseguidos por hacer la voluntad de Dios,porque de ellos es el reino de los cielos.

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Dios nos pide que tengamos valor cuando por ejemplo, se rían de nosotros y nos llamen tontos porque creemos en Dios.

Te sentirás bien por hacer lo que Dios te pide, porque lo que Él te pide es bueno.

Dichosos seréis cuando os insulten y os persigan, y digan contra vosotros toda clase de mentiras por mi causa. Alegraos y reoocigaos, porque será grande vuestra recompensa en los cielos, pues así persiguieron a los profetas anteriores a vosotros.

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Jesús ¿fuiste feliz?

Le persiguieron y hasta le mataron

Se rodeó de personas a las que nadie quería: enfermos, pecadores, niños

No buscó tener poder

Jesús vivió feliz

Jesús vivió pobre, sin lujos

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Tampoco quiere decir que lo estés pasando bien todo el rato.

Sí, yo fui feliz porque nunca me separé de mi Padre Dios, hice su voluntad y ayudé a muchos.

Ser feliz es hacer todo aquello que el Padre Dios te pide que hagas.Sin buscar excusas.

Ser feliz es estar en paz contigo mismo.

Jesús vivió feliz

Ser feliz no significa que no tengas problemas.

Nos dirigimos a Dios

Paso 4

Hablamos juntos conJesús

Esta canción nos recuerda que las bienaventuranzas conducen a la felicidad.

Paso 3

San Pablo hizo esta recomendación a los primeros cristianos.

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Paso 2

Prepara el rincón para rezar.Busca la biblia y adórnala.

Paso 1

Oración

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Jesús nos enseña a ser felices

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Señor, Tú caminas a nuestro lado en medio de nuestras alegrías y tristezas; por eso, podemos apoyarnos en Ti en los momentos difíciles.Gracias por el don de ser capaces de levantarnos cada día con confianza; porque Tú eres nuestra fuerza, nuestro refugio, nuestro apoyo.Danos fuerza para ayudar al que necesita nuestro apoyo en la vida de cada día.Amén

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