TIPOS DE ARGUMENTOS

TIPOS DE ARGUMENTOS

• Dependiendo de si las inferencias son deductivas, inductivas o abductivas, los razonamientos tendrán características y funciones diferentes. Pero dado que un razonamiento es algo que “acontece como parte del pensamiento”, requerimos del lenguaje para externarlo y convertirlo en algo objetivo.
• Cuando expresamos un razonamiento, éste se convierte en un argumento y los juicios o creencias que lo componen se denominan “premisas”.

• Otro de los elementos de estudio clásicos de la lógica formal es el razonamiento y su relación con el lenguaje. Cuando hablamos de razonamiento, nos referimos a la capacidad del pensamiento que nos permite conectar juicios o creencias por medio de inferencias, de tal manera que nos sea posible emitir opiniones, dar razones que justifiquen nuestras posturas, hacer análisis, descripciones o explicaciones.

INTRODUCCIÓN

• Las premisas se “unen” entre sí gracias a las inferencias, es decir, las relaciones lógicas que el razonamiento genera. Las inferencias son como el pegamento que une nuestros juicios o creencias y sin ellas no nos sería posible generar conclusiones, hipótesis, teorías o ningún tipo de explicación en general. Muchas veces se pasa de largo a las inferencias al describir la forma de los argumentos, ya que no se pueden detectar explícitamente a la hora de exponer el razonamiento, pero es crucial tener presente su función.
• Las inferencias pueden ser deductivas, inductivas o abductivas, entre otras.

• Los argumentos, en su sentido lógico, se componen de tres elementos: premisas, inferencias y conclusiones.
• Una premisa es un enunciado que expresa un juicio y debe incluir un verbo para admitir que está declarando algo. Preguntas o frases como “¡Qué miedo!” no funcionan como premisas, ya que no están haciendo una descripción ni son afirmaciones universales.

COMPONENTES DE LOS ARGUMENTOS

• La conclusión es un enunciado que se acepta o resulta verdadero dependiendo de la fortaleza de las inferencias que unen a las premisas o del contenido de las premisas como tal.
• De la relación entre premisas, inferencias y conclusión se deriva la validez o invalidez de los argumentos, así como su fortaleza o debilidad lógica.

COMPONENTES DE LOS ARGUMENTOS

Una inferencia deductiva es aquella que nos permite conectar premisas o silogismos que hablan de generalidades (“todos” los hombres son mortales) con premisas que hablan de un objeto en particular (Sócrates es un hombre), de tal manera que podamos declarar o transferir propiedades a ese objeto particular (Sócrates es mortal).

ARGUMENTOS DEDUCTIVOS

En un argumento deductivo válido, si decido aceptar las premisas, mi razonamiento me “obligará” a aceptar también la conclusión, aunque las premisas no sean verdaderas. Veamos dos ejemplos de argumentos deductivos válidos con premisas y concluciones falsas: 1) Todos hombres lobo aullan. El gato aulla... Por lo tanto el gato es un hombre lobo. 2) Todos los hombres tienen alas. Mi perro es un hombre... Entonces mi perro tiene alas

ARGUMENTOS DEDUCTIVOS

Se dice que los argumentos inductivos van “de lo particular a lo general”, veamos a qué se refiere esa indicación. Observa el siguiente ejemplo: He visto un cisne y es blanco He visto otro cisne y también es blanco He visto diez mil cisnes y eran blancos Por lo tanto, TODOS los cisnes son blancos

ARGUMENTOS INDUCTIVOS

Como podrás observar, los argumentos inductivos parten de premisas que afirman propiedades de particulares para después concluir una generalidad que afecta a todos los miembros de un conjunto, en este caso, del conjunto de los cisnes. La validez de los argumentos inductivos depende de si se encuentra un caso que refute la conclusión, que en el argumento del ejemplo, sería un cisne que no sea blanco. Existen argumentos inductivos muy difíciles de refutar, pero eso depende de lo que prediquen, del objeto del cual lo prediquen y de si ese objeto pertenece a un conjunto con una cantidad finita o infinita de elementos.

ARGUMENTOS INDUCTIVOS

Los argumentos abductivos sirven principalmente para generar explicaciones causales a fenómenos particulares, basándose en generalidades, juicios universales, principios o leyes según sea el caso. Se escucha un ruido extraño en el techo. Los gatos suelen caminar por los techos de las casas... Entonces es un gato el que está causando el ruido

ARGUMENTOS ABDUCTIVOS

Esas explicaciones pueden ser fuertes o inverosímiles, dependiendo de las características de la generalidad en la que se basa la explicación causal. Veamos un ejemplo de una explicación inverosímil que retoma el argumento anterior: Se escucha un ruido extraño en el techo Los vampiros salen en la noche y se desplazan por las azoteas ¡Entonces debe ser un vampiro en mi techo!

ARGUMENTOS ABDUCTIVOS

Si la generalidad en la que basamos la explicación causal no es material o lógicamente posible, o si es muy difícil sostenerla, entonces nuestra inferencia es débil. La validez de los argumentos abductivos depende de las pruebas que tengamos para justificar la verdad o falsedad de la conclusión. Yo puedo creer que en efecto, un vampiro es lo que provoca el ruido en mi techo, pero me será mucho más difícil sostener y comprobar eso, por lo tanto, el primer argumento en donde el gato es la causa es más fuerte que el segundo.

ARGUMENTOS ABDUCTIVOS