
El Banco Mundial proyectó una contracción del 5.2% en la economía global para el 2020, cifra que para América Latina asciende a 7.2%. Eso, en palabras sencillas, significa que entre 70 y 100 millones de personas entrarían a la pobreza extrema, una pérdida masiva de 195 millones de empleos, sin hablar del deterioro de la confianza del consumidor.