Grandes Imperios de la Antigüedad
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Created on April 10, 2020
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Transcript
LOS GRANDES IMPERIOS DE LA ANTIGÜEDAD
Índice
6. CHINA
5. JAPÓN
4. INDIA
3. EGIPTO
2. LOS PERSAS
1. LA MESOPOTAMIA ASIÁTICA
Índice
En la zona de influencia de los ríos Tigris y Éufrates surgieron las primeras organizaciones políticas de relevancia. Uno de los más antiguos pueblos que llegó a conformar un estado poderoso fue el de los sumerios, quienes adquirieron un importante nivel cultural, creando la escritura cuneiforme. Adoptaron la forma monárquica y atribuyeron al Rey la condición de “inquilino de Dios”, quienes luego de muchos siglos, fueron derrotados por los acárdicos. Después de luchas internas, se impusieron los amoritas o amorreos. A mediados del Siglo XX a. C. su rey Hammurabi sancionó el código que lleva su nombre. Constituía una recopilación de las normas de su época. Hammurabi es recordado como un codificador que amparó el derecho de propiedad, suavizó la legislación penal, estableció la Ley del Talión, morigeró la situación de los esclavos y negó a los amos derechos de vida y muerte sobre aquellos. Los amoritas fueron derrotados por los hititas. Entre el año 1100 y 612 a. C. se consolidó un pueblo semita, los asirios, que se caracterizaron por su espíritu bélico y por imponer su hegemonía mediante el terror. Fueron derrotados por los medos, cuyo rey Nabucodonosor destruyó Jerusalem. Los hebreos fueron liberados cuando Ciro el Grande, rey de los Persas, derrotó a los medos.
El imperio persa se extendió a lo largo de la meseta de Irán. No obstante adoptar una forma de estado autocrática, con crueldades, exacciones, arbitrariedades y esclavitud, los persas integraron uno de los pueblos más benévolos de la antigüedad. Su religión contrasta con otras de Oriente: sostenían la existencia de dos principios divinos: uno del bien u Ormuz y otro del mal, u Ahrimán. Los persas al ponerse en contacto con los reinos de la Mesopotamia y del Egipto, se contagiaron de muchos de sus vicios y adquirieron la práctica del despotismo y la arbitrariedad social. El imperio llegó a abarcar los actuales territorios de Irán, Irak, Jordania, Turquía, Armenia, Siria, Líbano, Palestina, Arabia y Egipto, lo que estaba dividido en distritos gobernados por sátrapas. En el siglo IV a .C. fueron derrotados por los ejércitos de Alejandro Magno.
La organización política de Egipto fue durante siglos monárquica. Sus faraones ejercieron un gobierno despótico, careciendo el pueblo de toda participación política en la conducción de los negocios públicos. El sistema económico se fundó en un estatismo integral. En el tercer milenio a. C. los faraones, divinizados por la mitología egipcia, hicieron construir monumentales pirámides.La sabiduría egipcia, privada de normas racionales, sin concepción clara de Dios, concluyó por perderse en el culto de los animales sagrados y en un conjunto de fórmulas y ritos mágicos donde el elemento moral se hallaba borrado y anulado. Todo pensamiento político y moral culminaba en la monarquía absoluta. El faraón fue considerado un dios viviente cuyos mandatos nadie podía resistir. Por ello, no se desarrolló en Egipto ningún código de leyes. Aparentemente no había necesidad de ninguna ley. Bastaba la palabra del dios-rey.El imperio egipcio subsistió cuatro milenios. Fue conquistado por los etíopes, los asirios, los persas, por Alejandro Magno, por los ptolomeos y hasta se convirtió en una provincia romana.
Las primeras tribus tuvieron una organización patriarcal. Al mezclarse con los pueblos autóctonos surgieron diversos reinos en los que prevalecieron formas despóticas de gobierno. La fuente del pensamiento hindú se encuentra en los libros Vedas (1.200 a. C.) que contienen fórmulas rituales, himnos y plegarias, y algunas reflexiones filosóficas son el principio y fundamento del brahamanismo. Su religión fue una mezcla de panteísmo y politeísmo. Sostuvo la trasmigración de las almas. Sirvió de base a una organización política rígida que neutralizó todo progreso social en la India. La sociedad hindú estuvo dividida en cuatro castas: 1) los brahamanes (sacerdotes y maestros); 2) los chatrias (guerreros); 3) los vaisyas (comerciantes, campesinos y artesanos); y 4) los sudras (jornaleros). La división entre castas fue absoluta. Los hijos de quienes vulneraban las rígidas leyes divisorias de las castas eran considerados parias, que debían arrastrar una existencia vil y despreciable.
Buda predicó una nueva doctrina opuesta a la rígida división social de la India. La doctrina budista se propagó por toda Asia Central y Oriental. De todas maneras, el budismo no contribuyó a romper las tendencias quietistas y paralizantes de origen brahamánico. La doctrina budista es una moral práctica y apunta a la salvación individual. Se propone lograr un estado de insensibilidad y aun de indeterminación total que se llama nirvana. El budismo fue paulatinamente desplazado por las fuerzas brahamánicas, las que se manifiestan en el Código o Leyes de Manú, cuyos preceptos tienden a consolidar el poder absoluto de los reyes y brahamanes, afianzando la división en castas.
El pensamiento político y religioso de Japón es uno de los más antiguos de Oriente. El shintoísmo fue la religión primitiva y tradicional, sobre la que se funda el carácter divino del Emperador, ideal de guerreros pero no de monjes. El shintoismo fue desplazado por el budismo y el confucianismo, practicado en China.
En el año 2.700 a. C. gobernaba el primer Emperador. Durante su reinado ya se usaba una forma primitiva de escritura, se empleaban vasijas y vestidos y se utilizaban signos monetarios. Durante la dinastía Shang o Chang (1.766-1100 a. C.) había una organización feudal. Hacia 1122 a. C asumió la dinastía Chou. Entre los siglos VI y IV a.C. alcanzó difusión el pensamiento de grandes filósofos, entre ellos Lao Tsé, cuyas enseñanzas darán impulso al taoísmo, y Confucio (552-479 a. C.). Confucio no pretendió erigirse en un reformador religioso. Fue un moralista y un filósofo político. Un predicador de principios de ética social compatibles con distintas posiciones religiosas. Para Confucio, cualquiera sea la condición social de los hombres, éstos deben cumplir exactamente con los deberes que les imponen sus situaciones propias. El orden se encaminará así hacia la perfección y el pueblo vivirá en esa forma en observancia de los supremos principios. Solo podía mantenerse el orden si cada ciudadano reconocía y aceptaba su lugar en la sociedad.
Para cumplir su rol de príncipe, éste debía tener una conducta virtuosa. El gobernante se encuentra sometido a un ordenamiento heterónomo que debe observar para alcanzar el propio perfeccionamiento moral y el de sus súbditos. Resulta así nítida la afirmación de la existencia de una ley suprema grabada en el corazón de todos los hombres que aproxima el magisterio de Confucio a las enseñanzas de los iusnaturalistas occidentales. El confucianismo se fundamenta en Tao. Él es el poder regulador de la vida humana y también la ley de la vida social. Esta ley fue dada al hombre por el Cielo junto con la existencia. Esta ley es la razón humana y la luz dada por Dios, que permite a cada uno distinguir espontánemente el bien y el mal, la verdad y el error. Es la ley natural que Mong Tse (Mencio) define diciendo que la naturaleza racional es orden del cielo; vivir según esa naturaleza constituye la ley del hombre.
En cumplimiento de tales leyes, el gobernante debe cultivar las virtudes de la rectitud y del justo medio, de la humanidad, de la equidad, de la urbanidad y de la prudencia. A su vez, los hombres en general, deben observar las cuatro virtudes que Mencio denominó fundamentales: el altruismo, la justicia, el sentido ritual y el conocimiento del bien y el mal. En contraste con las filosofías orientales que favorecían la consolidación del absolutismo, Confucio llevó su prédica moralista hasta el extremo de justificar la resistencia contra la tiranía. El gobierno – agrega Confucio – es lo que es recto, o sea que, gobernar es rectificar al pueblo, es decir, conducirlo hacia la observancia de las virtudes morales y políticas. Confucio murió en el 480 a. C. y su discípulo más destacado fue Mencio, cuyos libro contiene máximas políticas y expresiones adversas al despotismo. Durante los años 230 y 600 se expandió el budismo. Otra doctrina de carácter religioso que se afianzó en China fue el taoísmo, donde prevalecen las influencias hindúes y un pronunciado fatalismo.