Y colorín, colorado 3º A

Y COLORÍN, COLORADO

CEIP Domingo Lozano

3º A de E. Primaria

(Málaga)

En cada cuento encontrarás tres finales diferentes. Comienza a leer y elige...

SIGUIENTE

Curso 2018 - 2019

Primer final

Segundo final

Tercer final

BLANCANIEVES (j. y w. Grimm) paula y arianna (3º a)

Había una vez un rey viudo que tenía una hija llamada Blancanieves. Un día tomó como esposa a una mujer bella, pero malvada. La nueva reina, que era además bruja, sintió envidia de su hijastra Blancanieves cuando su espejo mágico le dijo que, al crecer, Blancanieves había pasado a ser la más bella del reino, y ordenó a un soldado que la matase. El soldado se apiadó de ella y la dejó libre en el bosque, donde encontró cobijo en una pequeña casita habitada por siete enanitos. Blancanieves se quedó allí a vivir con ellos, a cambio de ayudarles en las tareas de la casa. Pero la madrastra se enteró por el espejo de que seguía viva, y preparó una manzana envenenada. Entonces…

Ilustración de Anna Laura Cantone

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...se la llevó a Blancanieves, pero como estaba de mal humor no quiso abrirle la puerta a la bruja y se quedó sin probar la manzana envenenada. Y siguió viviendo muy feliz en casa de los enanitos. A la bruja, como le entró hambre, no se acordó de que la manzana tenía veneno, se la comió y se murió. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...Blancanieves probó la manzana y como le pareció que estaba muy rica, llamó a su amiga Rapunzel para merendar juntas. Rapunzel llevó más manzanas y, al final, a ninguna le pasó nada. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...Blancanieves se comió la manzana y se murió. Entonces llegó a la casa de los enanitos un príncipe con muchas ganas de hacer pipí y popó, y como nadie le abría la puerta para poder ir al baño, se hinchó de llorar y se lo hizo todo. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

el patito feo (H. C. Andersen) josé maría y unai (3º A)

Había una vez una pata que empollaba sus huevos. Eran siete y les faltaba muy poco para romper el cascarón. Un día notó algo extraño, algo nuevo: un octavo huevo, un poco más grande que los demás. ¿Cómo habría llegado hasta allí? “No tengo tiempo de pensar ahora en esto”, dijo la pata, y siguió empollando. Se abrieron los siete huevos, pero el más grande parecía no querer abrirse. Cuando por fin el huevo se abrió, salió un patito gordo, gris y desgarbado. Los demás patitos le daban de lado y se burlaban de él. Mamá pata le decía que no les hiciese caso y siempre llevaba al patito consigo. Hasta que un día, harto de oír como los patos, las gallinas, las ocas y hasta las ovejas se reían de él, avergonzado se separó del grupo y se escondió en un cañaveral. Mamá pata lo buscó y no lo encontró. Cuando todos se fueron, el patito salió del agua y entró en el bosque. Caminó mientras se hacía cada vez más de noche, hasta que vio una luz que provenía de una pequeña casa. Allí vivían una gallina y un gato. Como no lo dejaban en paz y le hacían daño, al día siguiente, en cuanto amaneció escapó de aquel lugar y llegó a un estanque donde pasó el otoño, y luego el invierno. Hasta que llegó la primavera y el pato sintió ganas de volar. Se había hecho fuerte y rápido. Entonces…

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Ilustración de Barbara Nascimbeni

...un día se fue a un lago y de repente, cuando el patito estaba nadando, el lago se lo tragó. Comenzó a hundirse y cayó de cabeza en una cueva. Cuando se levantó vio un tesoro y desde entonces, es un patito feo, pero rico. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...el patito feo voló y llegó a un lugar lejano donde había un cisne, que fue el que le dijo que él también era un cisne. Hablaron y jugaron, y desde entonces no dejaron nunca de ser amigos. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...voló y voló hasta que vio un extraño círculo negro. Cuando se acercó se dio cuenta de que era un agujero negro que se lo tragó. Apareció después en un mundo en el que solamente había cisnes y el agua era lava que se podía beber. Entonces se quedó allí para siempre. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

caperucita roja (j. y w. grimm) isabel y anastasia (3º a)

Había una vez una niña que vivía con su madre en una aldea. La abuela, que vivía en el bosque a media hora de camino, la quería mucho y le había regalado una capa de terciopelo rojo. Aquella capa le gustaba tanto a la niña que la llevaba siempre puesta, y todos la llamaban Caperucita Roja. Su abuela se había puesto enferma y su madre le pidió que le llevara un cesto con pasteles y frutas, no sin antes recomendarle que no se entretuviera y no hablase con extraños. A mitad de camino se le apareció un lobo que le preguntó a dónde iba y qué llevaba. Caperucita se lo contó todo y el lobo le propuso que cogiese flores para su abuelita. Mientras tanto, éste se adelantó y cuando llegó a casa de la abuela, la metió en el armario y se acostó en su cama poniéndose el gorro, las lentes y tapándose hasta el cuello. Cuando Caperucita había recogido un ramo de flores volvió al sendero y se puso de nuevo en camino. Al llegar a casa de su abuelita encontró la puerta abierta y entró. Entonces… .

Ilustración de Alessandro Sanna

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...Caperucita le dijo al lobo lo de siempre: ¡qué ojos más grandes tienes!, ¡qué orejas más grandes tienes!, ¡qué boca más grande tienes!... Y cuando terminó de preguntarle, sacó un cuchillo, asustó al lobo que salió corriendo y salvó a su abuelita. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...¡AAAAAAAAAAAHHHHHH!, gritó Caperucita. ¿Qué has hecho con mi abuelita?, le preguntó. El lobo no pudo contestarle, porque Caperucita había sacado ya un cuchillo. De repente, apareció un hombre en la casa. Era un defensor de los animales, así que le dijo a Caperucita que el lobo no era un ser peligroso y que no podía matarle porque, igual que ella, necesitaba comer y lo que le gustaba era la carne. Así que Caperucita se convenció de que el lobo no era tan malo como creía, aunque nunca más se volvió a ver a la abuela. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...y se encontró a su abuelita en la cama. Había podido salir del armario y consiguió echar al lobo ella sola. Como la abuelita estaba mala del corazón, Caperucita le dio las frutas que llevaba en el cesto y cuando se las comió se curó. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

la princesa y el guisante (h. c. andersen) jessica y ángela (3º A)

Había una vez un príncipe que deseaba casarse con una princesa, pero tenía que ser una auténtica princesa, así que decidió recorrer el mundo para encontrarla. Sin embargo, no era tan fácil, siempre había algo que estaba mal. Al no encontrar a una princesa de verdad en su viaje, decidió regresar. Durante una noche de tormenta, una muchacha se presentó ante la puerta del palacio pidiendo cobijo, y dijo ser una princesa de verdad. Le prepararon una habitación, pero como la reina desconfíaba, decidió ponerla a prueba y colocó un guisante en el somier de la princesa camuflándolo con veinte colchones y veinte edredones. Sin embargo, a la mañana siguiente, cuando le preguntaron qué tal había pasado la noche, la princesa se quejó de lo mal que había dormido y de que había algo duro en la cama que le había hecho moratones por todo el cuerpo. Esa fue la prueba definitiva que convenció a todos de que era una verdadera princesa, pues solo ellas tienen la sensibilidad suficiente para notar un guisante bajo veinte colchones y veinte colchas. Entonces...

Ilustración de Eva Montanari

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...decidieron casarse. Pero el día de la boda, el príncipe pisó sin querer el traje de novia de la princesa y ella se enfadó tanto que ya no quiso casarse con él. Eso pasó porque era muy delicada y una auténtica princesa. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...llegó el día de la boda y sin saber cómo, apareció un cerdo que se le había escapado a alguien. El animal se hizo caca en el vestido de boda de la princesa. Entonces, la princesa le pisó la cola y el cerdo se enfadó tanto que llamó a sus amigos cerditos y entre todos le ensuciaron todavía más el vestido a la princesa. Pero la boda siguió, al fin se casaron y vivieron felices. Un momento, espera... Esto sigue en el tercer final.

...la princesa se duchó, pero todavía seguía oliendo mal. Hasta diez veces se duchó, pero nada. No consiguió quitarse el mal olor. ¿Pero qué he hecho yo si soy muy bella? Y el cerdito vivió feliz, pero la princesa no. Y colorín, colorado, este cuento ya sí se ha acabado.

pulgarcito (c. perrault) david y yunaira (3º A)

Había una vez un leñador que tenía siete hijos varones. El más pequeño y despabilado era tan alto como un pulgar y se llamaba Pulgarcito. La pobreza asoló a la familia y, al no tener nada que comer, el leñador decidió abandonar a sus hijos. Una mañana los llevó al bosque y allí los dejó. Caminando llegaron a una casa donde una anciana les abrió la puerta y les dijo que pasaran allí la noche, pero escondidos porque su marido era un ogro. Cuando el ogro regresó a su casa descubrió a los niños y se los quiso comer en la cazuela, pero su mujer le convenció para que se los comiera al día siguiente. Pulgarcito, que lo había escuchado todo, despertó a sus hermanos antes del amanecer y se escaparon. El ogro se calzó las botas de siete leguas para alcanzarlos y al no encontrarlos entró en una gruta para descansar. Justo allí era donde se habían refugiado los siete hermanos. Entonces….

Ilustración de Nicoletta Costa

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...salieron corriendo de la cueva. El ogro les pisaba los talones, pero pudieron alejarse. Los niños pusieron trampas por todo el bosque y como el ogro iba distraído mientras los buscaba, cayó en una de ellas. Y nunca jamás consiguió liberarse. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...un lobo entró en la gruta, le metió una patada en el pompis al ogro y pisó a Pulgarcito, pero como éste era tan, tan fuerte, lo levantó y lo tiró encima del ogro. Salieron corriendo asustados el lobo y el ogro, pero cuando iban atravesando el bosque cayeron en un pozo infinito. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...Pulgarcito se hizo más grande que una ballena, aplastó al ogro y cuando, por fin, volvió a su casa y quiso entrar... ¡¡¡no cabía!!! Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

pinocho (c. perrault) JONATHAN Y NACHO (3º A)

Había una vez un hábil carpintero llamado Gepetto que un día encontró un bonito tronco y decidió hacer un muñeco de madera. “¡Lo llamaré Pinocho!”, decía mientras trabajaba. “¡Será un títere que saltará y hablará!”. El Hada Azul le concedió el deseo, no sin antes advertir a Pinocho que para ser un niño de verdad, debería demostrar que era generoso, obediente y sincero. Pepito Grillo le ayudaría en esta labor, él sería su conciencia. Los días siguientes, en lugar de ir al colegio, Pinocho desobedeció y se vio envuelto en una serie de malas aventuras llenas de desobediencias y mentiras. En una de ellas, Pinocho fue tragado por una ballena y en la barriga del enorme animal se encontró con Gepetto, que había sido engullido largo tiempo atrás, en una de las ocasiones en las que fue a buscar a Pinocho. Entonces… .

Ilustración de Lucia Salemi

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...como Pinocho seguía siendo muy desobediente, el hada le quitó el hechizo. Se quedó para siempre de madera y la nariz no dejó nunca de crecerle. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...el Hada Azul fue controlada por un diablo y le obligó a que Pinocho se convirtiera en una marioneta. Pero apareció Harry Potter, le devolvió la vida y le dijo: "rápido, salva al Hada Azul". Pinocho pudo salir de la ballena y derrotó al diablo, pero el Hada Azul ya se había esfumado porque se había ido con Harry Potter. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...pudieron salir de la ballena con la ayuda del Hada Azul. Una noche Pinocho, que seguía desobedeciendo, se durmió en un coche que no era suyo. Por la mañana los dueños del coche, al ver que era un muñeco de madera, lo hicieron trocitos y lo echaron a una hoguera. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

los tres cerditos (tradición popular inglesa) lola y gema (3º A)

Había una vez una familia de cerditos que crecía y crecía porque cada año nacían más y más cerditos. Como ahora había tantos, un día la madre llamó a los tres mayores y les dijo: "Queridos hijos, ya no tenemos sitio para vosotros y tenéis edad suficiente para que salgáis a recorrer el mundo."Los tres cerditos emprendieron el camino y decidieron que primero deberían construir sus casas, Para tardar menos y poder jugar, dos de ellos las hicieron de paja y maderas, mientras el mayor se esforzó más y la hizo de ladrillo. De pronto apareció un lobo feroz, y soplando tiró la casa de paja del primero y luego la casa de madera del segundo. Los dos cerditos escaparon y pudieron refugiarse en la casa del hermano mayor. Como el lobo no pudo derribar esta casa soplando….

Ilustración de Nicoletta Costa

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...llegó mamá cerdita, le tiró un dardo en el culo y ¡¡plofff!!, se cayó al suelo y se desmayó. Los cerditos salieron de la casa y entre todos llevaron al lobo a un río. Comenzó a llover mucho, dejaron que la corriente se lo llevara y terminó en el mar. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...(este final es continuación del primer final) papá cerdito lo encontró en la playa, porque era pescador. Entonces, pensó que era un pez y se lo llevó a su casa. Cuando preparó el fuego para cocinarlo, el lobo se asustó y pegó un bote, salió corriendo y nunca más se le volvió a ver. Y colorín, colorado, este cuento ahora sí ha acabado.

...el lobo se aburrió y se fue a pasear. Tropezó, se cayó por un acantilado y en el sitio donde aterrizó se encontró con las Sweet California. -¡Hola, chicas! ¡Soy superfan vuestro! Y se sacaron una foto juntos. Después fueron a la casa de los tres cerditos y cuando llamaron a la puerta, al verlas se emocionaron un montón. Pero las California se tuvieron que ir pronto y los cerditos se quedaron llorando. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

hansel y gretel (j. y w. grimm) alba y arantxa (3º a)

Había una vez dos niños muy pobres que vivían con su humilde padre y su madrastra cerca de un espeso bosque. Se llamaban Hansel y Gretel. Como la comida era muy escasa, un día la egoísta madrastra convenció al padre para que los llevase al bosque y los abandonara a su suerte. Hansel y Gretel habían escuchado la conversación y cuando estaban siendo llevados con engaños iban dejando migajas de pan en el suelo para seguir después el rastro y poder regresar a casa. Lamentablemente, al intentarlo se dieron cuenta que los pájaros se habían comido las migajas que dejaron en el camino. Perdidos en el bosque, pasaron la noche temblando de frío y de miedo. A la mañana siguiente llegaron a una casita adornada con sabrosos dulces y galletas de chocolate. Pero al entrar fueron atrapados por una bruja. Al ver que los dos estaban muy flacos los alimentó algunos días para que engordasen. Cuando llegó el día en que se los iba a comer… .

Ilustración de Anna Laura Cantone

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...Gretel abrió la jaula, sacó a Hansel y abrieron la ventana y se escaparon. Luego se comieron la casa de la bruja, cogieron un trozo de chocolate y por fin pudieron llegar a su casa. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...de repente, apareció el gato de la bruja. Si lo acariciaban, ronroneaba. La bruja tenía un colgante con magia y hechizó al gato para que fuera malo, pero se equivocó con la magia y el gato se hizo bueno. Entonces, el gato ayudó a Hansel y Gretel a escapar y así fue como consiguieron llegar de nuevo a su casa. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...apareció el gato de la bruja. De pronto, puso música y empezó a bailar. Montaron una fiesta, invitaron a todos sus amigos y terminaron todos bailando juntos. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

la cigarra y la hormiga (esopo) darío y ayoub (3º A)

Había una vez una cigarra que, sentada tranquilamente sobre una hoja, disfrutando del sol del verano, cantaba todo el día. Si veía pasar una pareja de ratoncitos buscando semillas, la cigarra cantaba: “¡Ay, ratoncito, cuánto afán por querer todo el año trabajar! ¡Cuánto afán, ratoncita: la fatiga te marchita!” También le dijo a una abeja que recolectaba el néctar de las flores: “¡Qué pena trabajar! ¡Qué pena fatigar!” Un día pasó una hormiga que cargaba con granos de trigo y le pidió a la cigarra que la ayudase, pero ésta contestó: ¡Hay quien nace cigarra y quien nace hormiga! ¡Hay quien canta y quien fatiga! Sin decir nada, la hormiga siguió trabajando. Pasaron las semanas. y los meses. Llegó el otoño y los animalitos se apresuraban a almacenar comida en sus refugios para los días fríos que se avecinaban. La cigarra, sin embargo, seguía cantando sobre su hoja. Hasta que un día ésta se cayó del árbol y la cigarra, aturdida, miró a su alrededor. El otoño se acababa y comenzaba a hacer frío. Caminó de un lado a otro buscando comida, pero no encontró nada. Entonces… .

Ilustración de Nicoletta Costa

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...vio la casa de la hormiga y le pidió quedarse todo el invierno con ella, hasta que llegase la primavera. A la hormiga le dio pena y dejó que la cigarra estuviese con ella todo el tiempo que quisiera, pero ayudando en las tareas y no haciendo mucho ruido. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...el padre de la cigarra la vio sola andando por el campo y la castigó sin salir más de casa, porque había sacado un cero en un examen. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...se quedó dormida. Los padres de la hormiga la vieron y la metieron en su casa para calentarla. Le dieron de comer y cuando pasó el frío, volvió a su casa y por fin se puso a trabajar. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

juan sin miedo (cuento tradicional popular ) adonay y berni (3º a)

Había una vez un muchachito que no tenía miedo de nada: todos lo llamaban Juan Sin Miedo. Un día dijo: “Marcho por el mundo; quién sabe si encontraré algo que me asuste”. Y marchó. Llegó a la capital del reino y vagó por sus calles hasta llegar a la plaza principal, donde colgaba un enorme cartel firmado por el rey que decía: “Se hace saber que al valiente caballero que sea capaz de pasar tres días y tres noches en el castillo encantado, se le concederá la mano de mi hija.".” Juan sin miedo se presentó y, escoltado por los soldados del rey, se dirigió al tenebroso castillo que estaba en lo alto de una montaña escarpada. Hacía años que nadie lo habitaba y su aspecto era realmente lúgubre. La primera noche se le apareció un fantasma, pero Juan cogió unas tijeras y comenzó a rasgar la sábana del espectro, que huyó por el interior de la chimenea hasta desaparecer en la oscuridad de la noche.La segunda noche se le presentó una bruja vieja y fea. Juan dio un salto, agarró el palo de la escoba y empezó a sacudirlo con tanta fuerza que la bruja salió disparada por la ventana. La tercera noche un temible dragón le lanzó llamaradas, pero Juan le lanzó una silla a la cabeza y el dragón salió corriendo por donde había venido. Entonces….

Ilustración de Libero Gozzini

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...se casó con la bruja y le dijo: "Yo no quiero a la princesa". Desde entonces, fueron felices y comieron murciélagos. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...Juan Sin Miedo se casó con la bruja. Pero un día apareció Bob Esponja y dijo: "¡NOOOOOOOOOOOOOO! ¡¡¡¡Yo me casé con la bruja!!!!" Entonces, la bruja hizo un hechizo, lo convirtió en un monstruo y se fue. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.

...Juan Sin Miedo no quiso casarse ni con la princesa ni con la bruja. Se fue corriendo y por el camino se encontró una espada. Y se casó con ella. Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado.