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Marine Le Pen

Benoît Hamon

Emmanuel Macron

Jean-Luc Mélenchon

François Fillon

La candidata del ultraderechista Frente Nacional encabeza las intenciones de voto. De 48 años e hija del histórico líder de la ultraderecha francesa, Jean Marie Le Pen, la candidata se planteó el desafío de imponer a su partido en el escenario político francés como una colectividad “normal”, con lo que consiguió relegar a segundo plano la percepción heredada de su padre respecto a que se trataba de un partido de ideas extremistas. No obstante, Le Pen logró diferenciarse de sus rivales políticos al esgrimir un fuerte discurso antiinmigración y antieuropeo. Incluso, el miércoles, en un acto en Marsella, volvió a arremeter contra los inmigrantes. Pero la ultraderechista quiere seguir los pasos del brexit británico, y también es partidaria de negociar con Bruselas la salida del euro.

Es un exbanquero de 39 años, que era un auténtico desconocido para el sistema político francés hasta que el presidente socialista François Hollande decidió designarlo hace tres años como su ministro de Economía. En agosto del año pasado, Macron renunció al gabinete y se desmarcó del gobierno para fundar su propio movimiento político, “¡En Marcha!” y capitalizar el electorado del centro, ante el descontento de los votantes. Joven y carismático, no se encasilla ni como de derecha ni de izquierda, lo que le llevó a posicionarse como el principal rival que hoy tiene Le Pen (también con una intención de voto del 23%) para la primera vuelta y firme candidato de pasar al balotaje de mayo.

El exprimer ministro de Nicolas Sarkozy (2007-2012) se afianzó como el candidato de la derecha francesa por Los Republicanos en las elecciones internas primarias. El político de 63 años desafió todos los programas e impuso uno que combina un enfoque claramente liberal en lo económico y al mismo tiempo conservador en el aspecto social. Fillon inició la carrera electoral con chances de alcanzar la Presidencia, pero fue perdiendo su condición de favorito al verse involucrado en un escándalo del que habló todo el país: el de los empleos presuntamente ficticios que otorgó a su esposa Penélope y a sus hijos cuando ocupaba una banca como diputado. Participará de la contienda electoral imputado por la Justicia de malversación de fondos y apropiación indebida de bienes sociales.

A los 49 años, Benoît Hamon es el candidato del Partido Socialista. Abandonó el gobierno de Hollande en 2014, disconforme con el rumbo “liberal” que a su juicio tomó el Ejecutivo socialista. Fue entonces cuando tomó la decisión de lanzarse a la carrera presidencial en defensa de un “nuevo modelo” de desarrollo. Hamon integra el ala izquierda del PS y perdió el apoyo de numerosos miembros del partido, pese a que ganó las primarias. Defiende un programa de izquierda y es partidario de aplicar una renta básica universal en respuesta al desempleo.

Exsocialista de 65 años, se postula por segunda vez a las elecciones de Francia. Político de izquierda radical, es candidato del movimiento Francia Insumisa y cuenta con el apoyo del Partido Comunista. Registró un sorprendente salto en las encuestas en las últimas semanas. A pesar de la afinidad con Hamon, se negó a establecer una alianza electoral. Como eje de su programa de gobierno, Mélenchon propone un plan de neto corte anticapitalista, que pretente aplicar a través de una “revolución ciudadana”. Además, es admirador de los gobiernos latinoamericanos de “inspiración bolivariana”.