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Transcript

La ruta periodística

A un año del derrame de Veladero:

crónica de la fuga del cianuro

Explícito: los informes de la UNCUYO y la Asamblea de Jáchal

El whatsapp que alertó a Jáchal

Barrick admite parcialmente el derrame

Rebotes en el laboratorio de la UNCUYO

El derrame de la Barrick envenenó el agua de Jáchal

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La noche del domingo 13 de septiembre comenzó a circular un mensaje a través de WhatsApp entre los vecinos de San José de Jáchal. Esa misma noche, unas 300 personas se reunieron frente a las puertas del municipio de Jáchal para pedir respuestas oficiales ante el rumor en las redes. El intendente Jorge Barifusa aseguraba que el Río Jáchal no había sido contaminado. Sin embargo, la asamblea de vecinos acordó conformar una comisión para reclamar y supervisar los análisis de las aguas que realizaría la Universidad Nacional de San Juan.

“Sólo hubo daños materiales en una cañería que transporta cianuro, sin verse afectada la salud de los trabajadores”, señalaba el comunicado de Barrick Gold. Las explicaciones oficiales empezaron a aparecer a medida que pasaron las horas:

  • El Secretario de Gestión Ambiental y Control Minero, Marcelo Ghiglione, explicó que se trató de “una falla técnica en una válvula” y que no se registraron inconvenientes de este tipo en los últimos 15 años.
  • El gobernador, José Luis Gioja, ratificaba las declaraciones de los empresarios mineros al afirmar que se trataba de una “contingencia técnica que fue controlada y que no generó problemas”.

Una crónica del sitio lavaca.org del viernes 2 de octubre, luego replicada por el sitio local Explícito, aseguraba que los vecinos y asambleístas del departamento de Jáchal contaban con un informe de la UNCUYO que confirmaba la existencia de metales en el agua de los afluentes del río Jáchal.

Efectivamente había un estudio realizado por el Laboratorio de Análisis Instrumental de la Facultad de Ingeniería de la UNCUYO. La responsable del peritaje fue la química María Esther Barbeito.El trabajo se realizó por encargo de la Municipalidad de Jáchal y las muestras fueron tomadas, de acuerdo con el relato, desde la localidad sanjuanina al otro día de conocido el siniestro. Esa tarea fue fundamental para los análisis. Este informe tiene una cláusula de confidencialidad, por lo que Unidiversidad no pudo acceder a él.

La investigación vuelve a la nota de Explícito en la cual se menciona a la Asamblea de Jáchal. El contacto a través de Facebook con la gente del pueblo confirma los datos del informe de la UNCUYO.